La depresión invernal se puede prevenir con un estilo de vida saludable
El psicólogo Ulises Armenta López de la UAS explicó que este trastorno es un desorden afectivo que impacta principalmente en la época decembrina
Redacción
Culiacán, Sinaloa.- El Trastorno Afectivo Estacional, también conocido como depresión invernal, puede prevenirse si se lleva un estilo de vida con conciencia, saludable y en equilibrio, señaló el psicólogo universitario, Ulises Armenta López.
El docente de la Facultad de Psicología de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS), explicó que este trastorno es un desorden afectivo que impacta a las personas principalmente en la época decembrina, pero que este puede prevenirse o presentarse de forma más leve si se mantienen un modo de vivir sano en cuanto a la alimentación, la actividad física y mental.
“Por ejemplo, no es lo mismo que una persona se la pase todo el día viendo televisión, encerrada en la habitación, a que salga, le dé el sol, que conviva con amigos, a caminar a hacer ejercicio y que esto le permita también activar de manera más bioquímicamente en el organismo ciertas hormonas que están asociadas con los estados de ánimo positivos”, mencionó.
Expuso que este trastorno ocurre principalmente, hacia el inicio del otoño e invierno, esto a causa de la disminución de luz solar característica de esta época del año, pues los días son más cortos y las noches más largas, dejando de producir el organismo ciertas hormonas y vitaminas.
“Esto debido a la ausencia de luz, asociado también a otros tipos de factores, por ejemplo, que la persona tenga algunas dificultades emocionales, que haya tenido alguna pérdida, que tenga poca actividad física, que haya dificultades de tipo afectivo sin resolver, además la otra parte es lo que está asociado con las fechas decembrinas”, indicó.
Asimismo puntualizó que algunos de los síntomas que se pueden experimentar las personas con la depresión estacional son: tristeza profunda, disminución de energía, afectación en el estado de ánimo, en la forma de pensar, de convivir, trastorno en la alimentación, en el sueño e incluso puede llegar a perjudicar la salud física.
“Pudiera confundirse, sin embargo, la temporalidad es un elemento, o sea, asociado a las fechas, pero además una vez que termina este periodo regularmente este disminuye o se quita. Es importante aclarar que no a todas las personas nos sucede lo mismo, entonces, mientras que algunas personas dicen: ‘ya empezó esta fecha que me trae malos recuerdos, muy triste’ (…) habrá otras que dicen: ‘qué padre es una época muy feliz, convivencia familiar’”, dijo.
Finalmente, el especialista recomendó prestar especial atención a los síntomas que presenta la persona y si estos persisten después de la temporada invernal, buscar ayuda psicológica para atenderlas.
“A nivel preventivo que la persona tenga un estilo de vida armonioso, equilibrado, que busque una buena lectura, que haga meditación, que visite a sus amigos, que tenga y construya relaciones sociales cordiales y sanas, en el trabajo, pero primeramente que replantee sus esquemas de vida para poder tener una mayor apertura a la posibilidad de vivir en salud mental y física”, concluyó.